CRESTERÍO AL PICO GILBO, EL " CERVINO LEONÉS".

 

CRESTERÍO AL PICO GILBO, EL CERVINO LEONÉS.

MANUEL  ALONSO, 25 de agosto, 2021

Riaño.

Inicio y final ;parking del puente de Riaño (una vez cruzado el puente a la salida de la localidad).

Recorrido: circular. Se puede terminar la ruta  si disponemos de varios coches  a través del pequeño pueblo de Horcadas (debemos entonces aparcar un coche en el parking de Riaño y otro en Horcadas).

Dificultad:Moderada si se realiza tal como lo describimos aquí, cresteando primero y luego bajando por la normal. La cresta tiene pasos expuestos ( III / IV ) .  Si se hace  de forma integral por la vía normal, dificultad media baja  (último tramo  con trepadas sencillas). Esto, en verano o temporada sin nieve. Con nieve , es otro cantar. Algunos tramos señalizados en la senda

Longitud, 7,5  kilómetros

Tiempo estimado:  Se realizó en 2,31 minutos pero fuimos muy deprisa. Lo normal es contar con tres horas o algo más.

Desnivel:600 metros

RECORRIDO.

Según salimos de Riaño y cruzamos el viaducto, encontraremos una explanada a mano derecha para aparcar y poco antes una pista forestal que sale en ligero ascenso bordeando el embalse.

Comenzamos con un breve rodeo por esta cara del embalse. Caminamos por un denso bosque de hayas y tras unos minutos y en un recodo de la pista tras cruzar un riachuelo veremos un poco más adelante un cruce de pistas.El camino sube a la izquierda en ascenso y en poco tiempo se convierte en senda . Ya entre el tupido bosque, disfrutamos de la sombra . Una vez abandonado el bosque empezamos a ver con claridad la cresta hacia la cima . ¿Sabías que a este pico le llaman el Cervino leonés?.  Aunque no lo parezca desde aquí, a lo lejos, sí tiene este parecido. Caminamos entonces por fuera del bosque ya por el praderío en dirección al collado que tenemos arriba y a la izquierda, donde se ven las zetas de la senda  bien marcadas. Subimos en pocos minutos y ya en el collado tendremos que tomar la decisión de por donde seguir. Por la derecha sale la vereda que ladea y sube. Nosotros subimos recto por la cresta.

Las dificultades en un primer momento son escasas. Luego, nos encontramos con un risco calizo , pulido y en caída que debemos pasar por lo más evidente y sencillo, por la derecha. Seguimos subiendo y tras otro paso complicado donde debemos vadear y cambiarnos más a la derecha, vamoas subiendo hasta la antecima. Aquí, la gente de cumbre nos mira ya como bicho raro. En pocos minutos , enlazamos con el sendero normal y alcanzamos la cumbre. El panorama es increíble. Las vistas desde el pico Gilbo, a 1.679 metros de altura, son de quitar el hipo.El embalse abajo se presenta con las aguas turquesas del Esla cuando antes las veíamos de otro color. La cresta y el paisaje que nos rodea nos deja unas sensaciones maravillosas. Lastima que había mucha gente y así el disfrute no fue todo lo que se presumía. Para bajar, cogemos la senda de la vía normal que sin pérdida baja , primero con bastante desnivel y luego de forma progresiva. Enlazamos con  la pista y  al coche. En las proximidades, una fuente nos servirá de refrigerio. Luego vendría la cerveza y la chuleta de ternera exquisita en Portilla de La  Reina.

                                                              ÁLBUM FOTOGRÁFICO