Las medianías del sur. De Granadilla a Guía de
Isora.(IV)
En mi
recorrido por la banda sur voy sacando lo que creo interesantes reflexiones. Es
verdad que hay muchos elementos comunes en la zona suroeste ; idiosincrasia, arquitectura tradicional,
hornos, eras, gastronomía y gustos comunes etc. pero también encuentro matices
que me llaman la atención. Por ejemplo, en un espacio como el sur que todos
creemos muy poblado, con una importante presencia de elementos foráneos ( la
influencia del turismo), con una masificación en el tema de las
construcciones,etc. vemos que por estas medianías desde Granadilla a Guía de
Isora se respira todo lo contrario,
tranquilidad, paz, genuinos elementos de nuestra cultura, caseríos pocos
poblados, gentes abiertas que se paran a contar su vida, y en definitiva una
más y mejor representación de elementos etnográficos , de hornos, eras,
utensilios y arquitectura típica, incluso de topónimos aborígenes muy
interesantes, representaciones mejor conservadas y con más presencia como digo
que en las medianías de Fasnia, Arico o comarca de Agache. Desde luego, el
aspecto etnográfico aquí tiene especial relevancia.
Al grano. Tres
itinerarios para profundizar en el espacio que va de Granadilla a Guía pasando por San Miguel ,Vilaflor y Adeje
son en mi modesta opinión los
siguientes; A) desde la zona de
Vento en Arona para desde allí conocer el entorno del roque Imoque (
pudiendo ver el caserío de Ifonche) y el
roque del Conde , recorrido circular o
no . B) Recorrido circular desde Acojeja pasando por el Jaral , lomo Corto y caserío de las Fuentes . C)Pateo por el
PRTF70, en su totalidad o parcialmente para conocer caseríos como Aripe y
Chirche. Otras interesantes alternativas pasan por recorrer el clásico bco del Infierno, los llanos de
Trevejos, Taucho por el Aserradero, Vera de Erques para conocer el paraje de Montiel o Chiguergue
y sus hornos .
Estos
serán los recorridos que iremos desgranando en próximas reseñas.
En plan
general toda esta zona reúne una gran
cantidad de barrios y/o caseríos que esconden impresionantes recursos,
elementos que bien explotados son llamativos para un turismo amante de la
naturaleza y de los recursos paisajísticos. Con el barrio de El Roque y Jama más allá de
Granadilla, con los llanos de Trevejos y sus campos de viñas,con Vilaflor y su
camino real pasando por Los Escurriales hacia Guajara, con las lavas y
pinos “a la puerta de casa” por arriba , nos adentramos hacia Arona y
Adeje. Por esas tierras , desde Vento ,
los roques del Conde y el de Imoque nos
permiten hacer una interesante excursión por esos parajes para conocer Ifonche
o las eras de esos lugares, los tagoror o simplemente ver desde lo alto de
cualquiera de esos monolitos la vista hacia la costa con el vuelo de los
cernícalos por el Bco. del Rey, barranco
de tajo profundo, con pozas y un impresionante acueducto como atarjea para
salvar estos desniveles. De su pariente el del Infierno, nada hablamos que
ya no se sepa. Cuando lo caminé hace 30
años, estaba virgen. Ahora con sus “muritos” de piedra, carteles, etc. ha
perdido su encanto salvaje. Me gusta más Taucho y su entorno con esas lomas
peladas, los pinos a lo lejos y un bonito camino que enlaza con Adeje pueblo
por la parte alta. Tijoco nos despide de Adeje y ya en el municipio de Guía de
Isora, pasado el barranco de Erques, otro emblemático tajo, podemos visitar
Vera de Erques (a 850 mt. de altitud) y rincones tan bonitos como la Casa
Montiel. Pero , donde creo que encontramos la esencia del sur es en este
municipio de Guía de Isora cuyo nombre
guarda relación con un lugar alto (=guía) y lleno de piedras o malpaís(=Isora).
Podemos subir al caserío de Las Fuentes,
declarado BIC ( del cual diremos más en nuestra reseña sobre un recorrido por
esta zona) o a Acojeja ( idem), que se encuentra sobre los 700 metros.Bonito
nombre y un lugar que guardo en mi corazón. Zona de escalada por el Barranco de
Guaria. Luego, El Pozo y por arriba El Jaral. Y más al sur,…,mis debilidades,
Aripe y Chirche. Constituyen un remanso de paz, un islote de vida entre tanta
locura de sol y playa. Que delicia estar por ahí. Ojalá mis hijos disfruten
mañana lo que yo en esos parajes. Sus
eras, el aire limpio, el sonido del silencio roto por los pájaros y ese
aire frío al anochecer que se confunde
con el sol tibio de la mañana, sentado frente a la” casa nueva”, ¡qué
paradoja!, vieja a rabiar pero esbelta y atractiva como pocas, son vivencias difíciles de olvidar.
Bueno, siguiendo hacia el sur y bajando por Garañones hacia Guía para disfrutar
de sus ricos dulces de almendras y demás, me doy una escapada hasta Chiguergue
para ver sus hornos y eras. Cuando llego a Chío, entre lava, picón y pinos,
monto mi tienda en la zona recreativa al anochecer y entre lo que llevo en mi corazón y el vino Zanata
que me tomo, no hay frío que valga. Hasta mañana.
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