Comienzo por el último viaje.Mi ilusión era este verano subir el Cervino. Ya lo conozco. Lo he tenido enfrente varias veces y cada vez me parece más hermoso. Pero en montaña, las prisas son malas. Esta vez, viajo sólo y con poco tiempo para llegarme hasta Suiza así que como le prometí a mi amigo Damián en semana santa, el Midi será el próximo objetivo. Y aquí estoy, dentro del coche a las cinco de la mañana, con una niebla que te cagas y sin saber lo que me espera. Pero he llegado hasta aquí así que me pongo en marcha. Cuando clarea y voy subiendo, las nubes van quedando atrás. Cuando veo este montañuco, aislado y afilado, me entran dudas. Al llegar al pié de la montaña, no lo pienso porque si no me quedaba. No hay nadie, ni por arriba ni por abajo, joder, esto se pone más duro.Pero voy subiendo aunque me equivoco algunas veces. Voy como una cabra buscando camino. La tercera chimenea no la veo. Subo por otra vía, mejor , originalidad que vale pues llego a la parte final. En la arista, saco fotos y pienso en como bajar,...despacito y con muuucho cuidadito. Después de rapelar dos veces, la veo desde abajo, que gozada,... Esta noche me voy a beber unos vinos y le mandaré unas fotos a mis amigos Ramón y Damián que estuvieron por aquí en el verano pasado conmigo.
Leo en un panfleto que amablemente me deja la chica del hostal donde hoy me quedo , la frase como título, "en busca del sur". Curioso, los del norte quieren el sur, los del sur , el norte.Sin duda, el hombre es un viajero por naturaleza. Le une unos vínculos a su tierra pero su campo de acción es ilimitado. Cuando termino de leer, suena de fondo la banda sonora de la película "la vida es bella". Está claro que somos nosotros la que la estropeamos a menudo. Y luego la de "gladiator", ¡ah!, caminar, luchar ante las adversidades, vivir sin pararse,... sólo falta ahora que me han puesto el postre que se oiga de fondo.."memorias de África"
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